Hola, Finuc@s!
Hace unos días os contaba y os enseñaba en imágenes cómo había vivido, un año más, la romería de Aljaraque, el pueblo en el que resido, y también os adelanté que hoy iba a enseñaros con más detalle alguno de los complementos flamencos que diseñé especialmente para esta romería, unos para clientas y otros para mí, que no me gusta perderme ni una! Pues, si os parece, vamos con ello...
Una, dos... camisetas flamencas!
Lo primero que os voy a enseñar son estas dos camisetas, diferentes la una de la otra, pero flamenquísimas las dos. Comenzamos taconeando...
Esta ha sido para una de esas clientas que yo llamo "reincidentes", porque ya me encargó unas para ir al Rocío y ahora quería ésta para combinarla con su falda en la romería de la Virgen de los Remedios.
El detalle que combinaba a la perfección con la falda es la tela que forra los tacones, que es del mismo estampado, con pequeñas florecillas en tonos de rojos y verdes, así que el conjunto quedó ideal, muy alegre y muy romero.
La camiseta de los tacones, como os he contado, fue un encargo para una chica adulta, pero esta flamenquita rubia que véis ahora es casi igual que su dueña, una peque de diez años que también estrenó esta prenda en la romería.
Igual que pasó con los tacones, para confeccionar esta camiseta flamenca usé los mismos estampados que llevaba la falda con la que se combinó, lo que hace que el conjunto resulte más desenfadado y más juvenil que si llevas una blusa o un corpiño flamenco, que "viste" más formal.
Tres: un bolso flamenco...y un canotier!
Camisetas os he enseñado muchas, de muchas formas y colores y en muchas ocasiones. Pero bolsos flamencos todavía no, y cuando digo flamencos, me refiero a los que se confeccionan a conjunto con el vestido o traje de flamenca, con sus mismos colores y estampados, para ir coordinadas hasta el último detalle. Hoy os voy a enseñar uno mío, y que tiene una curiosidad que ahora vais a ver...
Este es el bolso que estrené este año, a conjunto con el vestido que os enseñé en este post sobre la romería, y que, como dato curioso, tiene una boquilla metálica muy especial: además de servir como cierre del bolso, también hace las veces de asa para colgarlo del brazo o llevarlo de la mano.
Y no sólo eso, porque además no se cose a la tela, ni se pega de ningún modo, sino que lleva unas varillas que se sujetan con tuercas y que permiten que la tela del bolso se sujete frunciéndola con ellas. No sólo es fácil confeccionar la bolsa, es fácil colocarle la boquilla y además, como detalle extra, tienes la ventaja de poder tener varias bolsas diferentes y usar la misma boquilla con todas, porque las puedes intercambiar sólo con soltar la tuerca y sacar las varillas. Práctico ¿no? Para las que tienen muchos vestidos de flamenca distintos seguro que lo es.
Y por último, os enseño el complemento estrella: el canotier. Este modelo de sombrero, también conocido como "chevalier", en honor al actor y cantante francés Maurice Chevalier (París, 1888-1972), que lo hizo popular en sus películas, ha estado de moda en distintas épocas del siglo XX. Es, por ejemplo, el sombrero típico de los gondoleros venecianos; la diseñadora Coco Chanel (Saumur, 1883-París, 1971), icono de la moda y contemporánea de Chevalier, en su época de sombrerera lo elevó a la categoría de alta costura, y ahora, ya en el siglo XXI, se ha convertido en un tocado muy favorecedor para vestidos de ceremonia y para adornar los trajes de flamenca de esta temporada.
El proceso para customizarlo a conjunto con el vestido que queráis, tanto si es para una ceremonia como si es para acompañar un traje flamenco, es muy sencillo: tan sólo tenéis que buscar el sombrero que mejor se os ajuste (en cualquier cestería o sombrerería lo encontraréis), y las flores que mejor conjunten con los colores de la ropa. Yo elegí los colores que adornaban a contraste mi vestido, y las flores eran las típicas rosas de tela que usan las flamencas para ponerse en el peinado. Las cosí al sombrero, intercalando alguna margarita para darle un tono más campestre, y "et voilà!", ya tenía mi canotier romero.
Si queréis conseguir un efecto más sofisticado, para acompañar a un traje de ceremonia para una boda, o una comunión, lo suyo es que le pongáis unas flores de gasa y algún trozo de tul o de rejilla, y el efecto puede ser espectacular!
Aquí tenéis mis complementos romeros, que os puedo asegurar que fueron de lo más "comentado", y es que los sombreros me "pierden", y no desaprovecho la ocasión de poder ponerme uno, pasearme y dejarme ver...
Como ya he ido diciendo por ahí, ésta es la última romería del año para mí, creo... (porque eso nunca se sabe), así que ahora tengo un año para pensar en qué me voy a diseñar para el año que viene e intentar dar otra vez la campanada!
Ahora ya toca despedirse hasta el próximo miércoles, en que volveré a la normalidad (espero...) y a la rutina habitual del blog, con más complementos, más novedades, y todo lo que va surgiendo en este universo 2.0. Que sepáis que ya os estoy enviando millones de besos y de gracias por pasaros por el blog y quedaros un ratito conmigo. Chao!!