Hoooola, Finuc@s!
La primavera es renovación, es vida nueva, es un nuevo punto de partida desde el que comenzar, y este blog estaba necesitando un poco de todo eso, así que aquí lo tenéis: ¡tachán! ¡¡La nueva imagen de Cá la Fina!! Plantilla, logo, todo nuevo. "La primavera ha venido y nadie sabe cómo ha sido..."
Estoy cantarina, no lo puedo remediar, aunque de tod@s es conocido el tópico de "coser y cantar", así que no extrañaros (de que llueva, sobre todo). Además, con mucho motivo, con todos los motivos del mundo, porque no me diréis que esta plantilla, la nueva imagen del blog, no es para cantarle y piropearle guapa, guapa y guapa (y ya tenemos un pasodoble, que no?).
Bueno, euforias aparte, voy a explicaros un poco toda esta explosión de color y de vitalidad en la que se ha convertido el blog. Quienes me conocen de cerca saben que soy un espíritu inquieto, que siempre quiero estar cambiando cosas, renovando, buscando otros horizontes. No es que me canse muy rápido de las cosas, pero hay veces que sientes que estás como un poco apagada, anodina, sin mucha chispa, vamos. También es verdad que suele ocurrirme en invierno, que es la época en que todo se aletarga y parece como dormirse... Pero es llegar la primavera, la sangre se altera (otro tópico también) y me vienen unas ganas de cambiar cosas!
Antes, cuando no tenía blog, los cambios los hacía en casa: cambiaba los muebles de sitio, la pintura de las paredes, las telas de las cortinas..., pero ahora canalizo todas esas ganas de renovación en el blog, y dejo a mi marido un poco tranquilo, que es el que se encarga de coger el rodillo y cambiarle el color a las paredes. Así que he trasladado la renovación del feng shui a Cá la Fina: nueva plantilla, nuevo logo, nueva paleta de colores, nueva vida.
Si recordáis, la antigua plantilla era un poco, como diría, de estilo shabby chic, inspirada en ese estilo de decoración que nace en la campiña inglesa, que mezcla elementos modernos y clásicos, formas redondeadas y, sobre todo, muchos colores pastel, como el rosa bebé y el verde agua. En lugar de ponerle de fondo estampados florales, que ya hubiese sido muy "reina madre de Inglaterra", mantuve los lunares como signo de identidad (por muy fan que sea de lo british, una sigue siendo muy flamenca).
En aquél entonces ya conté con la ayuda impagable de mi amiga Yudy Giraldo, diseñadora gráfica y alma mater de Creativa in Situ (antes Ingenio DIY), que ha sido siempre, y es, mi salvavidas cada vez que los códigos de html me dan un susto de muerte (por inquieta y por "tocona", que siempre lo estoy toqueteando todo). Yudy me ayudó a retocar aquella plantilla y me enseñó un montón de cosas acerca de estos códigos y de cómo modificarlos para cambiar su aspecto.
Pero, mira por dónde, este invierno, después de las fiestas navideñas, estamos las dos hablando un día y contándonos que no estábamos muy "motivadas" que dijéramos (ella también anda liada intentando arrancar su nuevo proyecto), y como me conoce bien, va y me pregunta "y tú, ¿tienes pensado hacerle algo nuevo a la plantilla?" Yo pegué un bote de la silla: "creí que no me lo preguntarías nunca, Yudy, precisamente te lo iba a decir..." Y ahí empezó todo otra vez.
Yudy es la persona idónea para encargarle cualquier proyecto de esta clase porque tiene algo fundamental para mí: mucha paciencia, porque conmigo hay que tener mucha paciencia y "arremangarse". ¿Por qué digo esto? Porque es verdad, jajaja, porque reconozco que vuelvo locas a las personas, yendo de un asunto a otro instantáneamente, sin pararme casi a pensar, y cuando veo que algo ya funciona, quiero darle otra vuelta de tuerca y complicarlo un poco más, y reconozco que muchas personas acabarían por dejarme ahí y decirme "allá te las compongas como puedas, querida". Pero Yudy no, Yudy está hecha de otra pasta, y es como una madraza que te acoge con toda su santa paciencia y te pregunta una y otra vez "¿cómo lo quieres? ¿así? ¿hacemos otra prueba? ¿ahora mejor?", y no te deja hasta que no estás contenta del todo. Y eso vale mucho.
Yo creo que ha acertado del todo eligiendo el nombre de su nuevo blog (todavía en proyecto, insisto), Creativa in Situ, porque es una mujer llena de ideas y de recursos para todo, que está en continua formación y que es capaz de diseñar "boniteces" como este diseño que estáis viendo ahora, radicalmente opuesta al anterior, de estilo minimalista y muy vital. Es por eso que me costó decidirme por una, bueno, en realidad no me costó mucho: me enseñó la primera y dije "me encanta, Yudy..."; me enseñó la segunda, y grité "¡quiero estaaaaa!". Y ya. ¿Por qué? No hay más que verla, es una chulada, ¿o no?
Una vez elegida la plantilla, nos pusimos a trabajar en las paletas de colores, y para eso nada mejor que una visita a In color balance, donde puedes ver paletas de todos los estilos hasta aburrirte! Lo cierto es que, en este caso, tampoco fue demasiado difícil la elección, porque yo tenía claro que quería colores fuertes, alegres, vivos, que transmitieran la luz y la energía de la primavera, y creo que lo hemos conseguido con esta gama de buganvilla, rosa, verdes brillantes y azul celeste.
La cabecera también se ha simplificado y modernizado: ha desaparecido lo del taller y ahora aparece el nombre sólamente, con más presencia, más personalidad. Para ello escogimos entre las dos una tipografía contundente, como channel, que no necesita muchos más adornos. Sólo una de las letras cambia, la I, que ahora se convierte en la aguja que está cosiendo la luna, que también ha cambiado sus tonos, recogiendo todos los de la paleta de colores. La tipografía del texto es muy parecida a la anterior, pero esta vez es más estilizada y más simple. Y como colofón, la firma, que hasta en eso se ha entretenido mi diseñadora favorita, para que los posts terminen siempre con mi nombre y un pequeño slogan: la bloguera costurera. Esa soy yo.
Pero es que aquí no queda todo, no, ni mucho menos. Si abrís la puerta de la tienda, os vais a encontrar con la misma imagen renovada y coordinada con el blog: un espacio diáfano y luminoso en el que ahora lucen mucho más mis diseños y que incorpora una gran novedad: las opiniones de algunas clientes y fans de Cá la Fina, que se han prestado a colaborar para decirle al mundo qué les parece y cuál ha sido su experiencia. Impagable. Bueno, ya encontraré la forma de agradecerles su colaboración y su cariño, que la cosa no es para menos.
Yudy está enamoradísima de la tienda, y yo también. Podríamos haberle puesto más cosas, como un carrito de compra, pero mi forma de trabajar con mis clientes es tan directa, y las prendas son tan personalizadas, que al final siempre acabamos intercambiando un montón de correos, y el carrito no sirve para nada. Así que sigue siendo un gran catálogo para que podáis escoger e inspiraros, el más chulo que me podía hacer.
Y esto es todo lo que quería contaros y que guardaba tan en secreto. Uffff, vaya peso me he quitado de encima, ¡por fin lo solté! Ahora llega el momento de disfrutarla y de sacarle todo el partido posible, de mostrarla y de que todo el mundo se enamore un poco más de Cá la Fina a través de este blog y de la tienda. Son mucho más de lo que me había podido imaginar. Muchas gracias, Yudy. Me has hecho muy feliz, y lo sabes...
¡Eeeeeeh! ¡Frenaros en seco! Que esto no va a quedar aquí, habrá que celebrarlo, ¿no? Que además se acerca el cumpleblog, que el año pasado no hicimos nada especial y este año estoy muy loooooca!!! Pues permaneced atent@s a las redes, porque en nada os anuncio qué fiestón voy a organizar, porque sí, porque este año me lo pide el cuepo! Chim pon!
Y ahora sí, ahora espero vuestros comentarios más que nunca para que me digáis qué os parece. ¿Os ha gustado el cambio? ¿Os gustan los colores? ¿Me pierde la pasión o ha quedado bonito de verdad? Eso sí, no os quedáis sin vuestro millón de besos, y de abrazos y de gracias por esperarme pacientemente (como Yudy) y estar ahí. Se os quiere muuuuucho!! Chao!